Rapture
La mañana me descubrió transformada en la bestia del infierno que me habita, con rastros de la presa devorada por todo el cuerpo, aún con sangre fresca en los colmillos, hambrienta, exhausta después de la persecusión, saboreando los restos de las entrañas, lamiendo las gotas calientes que expulsaba el corazón palpitante del animal sometido a la asfixia de mis piernas abiertas, deseando, violando, gimiendo, pidiendo un poco más de tiempo.
-esta soy yo
-esta eres tú
Odié la luz del día derramada insolente, y me negué a abrir los ojos hasta que la realidad que detesto se iluminó con toda su gracia, me pintó de gris, me dejo instalada en mi humanidad y salió para bendecir el resto del planeta.
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